CARICIAS EN MI CUERPO Y MI ALMA, TAN DULCES QUE DOLIAN.
EL CUERPO QUE HABITO ERA ENTONCES INCANDESCENTE
COMO LO FUE EL MUNDO AL NACER.
SIN EMBARGO ESTABA MURIENDO.
CENIZAS, ESPARCIDAS COMO AZUCAR EN CADA RINCON
DOLIA TANTO AMARLE.
EL ME HERIA HACIENDOME FELIZ.
DESEABA HABLAR
PERO SOLO LO AMABA CELEBRANDO EL FUNERAL
DE LA ESPERANZA.
DANDO EL PASO EFíMERO
DESDE LA CULPA HACIA LA TENTACIóN.
COMO UN LOBO
LAMI SU SONRISA
Y EL LAMIO MIS LáGRIMAS
LOS RIOS DE SANGRE LATIENDO EN SUS MANOS
CON ESAS RAíCES QUE SOLO SE TALLAN CON LOS AÑOS
ESE BRILLO. DOS PEQUEÑOS DESTELLOS EN LA OSCURIDAD.
TODO ESTABA HúMEDO. MIS OJOS TAMBIEN LO ESTABAN.
LLORABA Y REIA EN UN SILENCIO ESPECTRAL
QUE DEJABA TRASLUCIR SOLO SUSPIROS INCONCLUSOS,
TRAGADOS EN PARTE, TRAGADOS COMO TRAGABA GOTA A GOTA
MI DOLOR Y MI AMOR