Soy quien te ama, en secreto,
incondicional, a quien tú nunca miras,
aquel que sufre por tus penas
y se alegra con tus sonrisas;
aquel que llora amargamente
si ve una lágrima en tus pupilas;
aquel que gasta su tiempo
pensando cuánto te amaría;
aquel que por ti sueña despierto,
aquel que por ti suspira.
Soy quien te ama, desde una celda
de silencio, desde su alma misma;
soy quien te pierde constantemente
en la inexpugnable lejanía;
quien por ti sobrevive,
quien por ti agoniza;
quien piensa en tus adorables sueños
en medio de su inacabable vigilia;
quien bebe de una ilusión, de un imposible,
para saciar su sed infinita.
pero...¿algún día sabrás de mi?
¿de mi fascinación? ¿de mi desdicha?
¿ o acaso seré un espectro
cuya existencia jamás será conocida?
¡Que dolores los míos! interminables
mientras tú te extravías:
yo sufro tu ausencia,
tengo clavadas en el alma espinas;
cuando te veo todo es un ensueño,
cuando no estás todo es una pesadilla;
si sonríes me siento libre,
más libre que cualquier brisa;
si lloras soy esclavo del sufrimiento
que me habita...
¡Soy quien hace suya tu tristeza,
tu esperanza, tu alegría!
Soy quien ríe si tú sonríes
y medita si tú suspiras...
¡Asi es! cada uno de mis pensamientos
alrededor de tí gira,
como una ronda de llamas
entorno a una presencia divina...
...
¡Soy quien te ama!
¡Soy quien te necesita!