Ven, entremos a la habitación,
champaña fría, música suave, luz tenue, atmósfera de pasión,
dejemos a la intemperie nuesta desnudez,
poco a poco, despacio, hagámoslo a la vez,
sin perder la placidez, sin perder la emoción.
Quiero que hagamos el amor y el sexo,
si, así es, no estoy confundida,
el amor y el sexo.
Hazme el amor con sutileza,
ser tuya de los pies a la cabeza,
sentir tu respirar, escuchar tu gemir,
palabras apasionadas deseo oír,
anhelo descubrir de el amor su grandeza.
La llama del frenesí se ha adueñado de nuestros cuerpos,
¡No te detengas!,
Hagamos el sexo con locura,
salvajemente,
desquitemos estas ganas de devorarnos desquiciadamente,
seamos libres a nuestros deseos carnales,
aunque nos condenen de ilegales,
límites no existen en nuestras mentes.
Hagamos el amor y el sexo.
No te arrepentíras.