Hace calor, es verano y el sol calienta mas de lo normal
me despojo de mi bolso y mis zapatos- de la calle acabo de llegar
el trabajo estaba duro, la imprenta, los clientes, que mas da
me recuesto en una silla solo quiero un momento descansar.
El timbre suena, en la puerta veo una sombra ¿quien será?
me levanto presurosa, debe ser el vendedor; vino a cobrar
abro, un poco desconfiada y cual seria mi sorpresa era mi amor me vino a visitar
traía en su mano una caja decorada y en la otra un ramo de rosas blancas con perlas de cristal.
Un detalle que enamora, que cautiva, es la muestra de un amor de realidad
con un beso apasionado le agradezco y lo invito a una copa de chanpán
y brindamos por los sueños por lo nuestro y el deseo deformar un lindo hogar
por momentos el silencio se hizo eterno no pudimos las ganas aguantar.
La pasión de nuestros cuerpos al desnudo las copas de aquel dulce chanpán
proporcionan el efecto requerido y nos amamos como nunca en el sofá
fueron muchos los momentos que vivimos aquella tarde de verano sin igual
que quisiera repetirlos sin perjuicios recibiendo rosas blancas decoradas con perlas de cristal.