Una chispa misteriosa
como una estrella fugaz
transforma mis pensamientos,
hace real lo irreal.
El futuro es mi presente,
el presente dejo atrás,
lo real e imaginario
sin límite que trazar.
Confusión, sueños, locura,
ejes de una misma acción,
todos crecen en penumbra
para ofuscar mi visión.
Si aquello que me persigue
donde quiera que me muevo
es real o imaginario
o fruto del pensamiento,
si es difícil separar la realidad de los sueños,
¿cómo saber si dormimos
o si soñamos despiertos?
Una chispa en mi cerebro
como fuego artificial
dispara las emociones
sin que las pueda parar.
Acciones que sin sentido
llenan de golpe mi vida,
un momento de mil instantes
que me hacen sentir perdida.
Cómo encontrar la cordura
cuando en un momento así
aunque mire alrededor
no distingo quién soy yo.
Si estoy dormida o despierta,
aunque quisiera decir
que soñé en otro mundo
sin saber que estoy aquí.