Hay días que en mi la paciencia brilla por su ausencia, los dolores, el cansancio y la dichosa fibroniebla no da tregua.
Es bien sabido por los que nos sentimos apresados por la dichosa Fibromilagia que hay momentos que no nos soportamos ni a nosotros mismos. Pese a ello vamos por la vida con la sonrisa puesta, seguimos en la lucha día a día, unas veces con más fuerzas, otras muy menguadas, pero seguimos a nuestro ritmo como buenamente podemos.
A parte del dolor y cansancio la memoria nos juega muy malas pasadas, es duro querer decir una palabra y quedarse en blanco, si bien es cierto que si logramos no ponernos muy nerviosas,-cosa muy difícil- la palabra brota, pero a destiempo porque nadie va estar esperando que nos expliquemos como es debido.
Esto nos lleva a temer el tener que responder a algo de inmediato, y poco a poco tratamos de buscar palabras o gestos que nos saquen de atolladero. Bien es cierto que hay días mejores, temporadas mejores, pero cuando el brote nos acosa no hay retroceso, ahí se queda.
Lo lamentable es que esto no lo entiende nadie, cuando digo nadie, eso es lo que digo, nadie.
Y si para encima quienes te rodean son tan exactos, tan perfectos que nunca cometen falta alguna, jamás se equivocan y te reprochan tu proceder terminamos poniendo en duda hasta aquello de lo que estamos ciertos.
Ese comportamiento no ayuda nada, más bien todo lo contrario porque al final lo único que se logra es crear un estado de ansiedad, de nerviosismo y de mal ambiente.
El que nos corrijan continuamente, que se ponga en duda aquello de lo que estamos agudiza más el problema. Sería bueno que la gente se diesen cuenta que una cosa es no ser capaz en un momento dado de expresarse y otra es que no sepamos lo que hacemos o decimos, y que esas situaciones si no son bien entendidas lo único que sirve es para que nos vallamos cerrando en nostras mismas.
Es muy difícil no ser perfectos en un mundo de perfectos, de personas que jamás se confunden, que todo lo que dicen y hacen está bien.
Lo cierto es que es mucho más fácil que se entienda que una tenga dolores, cansancio, insomnio. Pero que no seamos capaces de explicarnos en un momento dado. ..
Y como quejarse si como en mi caso soy una afortunad ya que no puedo estar mejor cuidada de lo que estoy. Otra cosa es que se comprenda que mi mente cada vez está menos ágil.
Que vamos hacer, será pedir mucho que nos entiendan. Como lo van hacer los demás si nosotras mismas no nos entendemos.
(Fibromialgia y fibroniebla
En fibromialgia es muy característica la fibroniebla que consiste en la incapacidad de concentrarse o retener información en ciertos momentos, o incluso incapacidad para conseguir mantener una conversación o mantenerse centrados en la lectura de un libro; estas son las características más importantes que acusan los enfermos de fibromialgia con este síntoma de la enfermedad que se ha denominado como fibroniebla)