Lo importante es lo inmediatamente pasado, pensamos que todo dejaría de ser o simplemente sería perfecto si no hubiese sido y el desenlace de nuestra tristeza moriría con el pasado ya muerto.
Lo real de todo es que bueno o malo las acciones tendrán siempre consecuencias y nuestra vida tiene que ser abierta para acepta, afrontar y superar las desdichas o vivir fascinado de las alegrías que estas conlleven.
El amor es más que una palabra, son acontecimientos y ante todo silencios que sufridos aceptamos, añorando vivir en el instante del tiempo; la pizca más hermosa de la ilusión y el sentimiento o emoción que nos hace humanos.