La muchacha fue un botón,
Tenía un ramo de orquídeas,
Hizo un pacto sanguinario,
Deshojó mil margaritas.
La mujer fue útil y herramienta,
Trajo marraquetas y hallullas,
Plantó árboles y escribió libros,
Fue manzana y después naranja.
La anciana, con colchón y cochino,
vio crecer a sus hijos y nietos,
Baila, se ejercita y tiene un diario:
Su alianza, su última voluntad:
\"No lloren por quienes están muertos,
Sino por quienes están naciendo.
Reciban mis retoños y sus vástagos
Mi casa, fortuna, derechos de autor.
Donen mis órganos, crémenme, entiérrenme.
Cúmplase mi alianza, mi última voluntad.
De bebé a morir.\"