Un hueco se presenta
toma mi mano y lo recuerda
más siquiera lo he percibido;
he cerrado mi mente
y el otoño ha vivido.
Atravecé selvas de dolor
y cuestas de olvido
madrugue cuando la fuerza ha caído
y he dormido, cuando la flaqueza
ha sucumbido.
He tirado un carro de recuerdos,
he vivido momentos tensos
he coronado eventos indiferentes
asumiendo el control de la mente
deambulando en el jardín de lo futil
cosechando lo reelevante
tosiendo momentos oxidados.
Hoy te recuerdo y sin tus labios
procesando el cielo que ha muerto
contando las estrellas que perdí
los universos que no crecieron.
Estoy conforme con la mirada perdida
tratando de sacar una raspa de cordura
posponiendo el tiempo en el cual elegiré
curvando el potencial del día a día,
porque es muy fácil
camuflajear lo que se siente
en concordancia con el mundo,
no soy de mi ni de nadie
un choque y una mancha
un pequeño zancudo tropenzando
en el parabrisas de la historia,
aún así sigo adelante.