Juli Zam

Pobres Flores

Las pobres flores se empiezan a marchitar

resignadas pierden su perfume, sin poder escapar

infelices, obligadas,  adornan tu féretro

su belleza desperdiciada ni siquiera puedes mirar.

 

Acabó mal tu orgullo, tu soberbia, tu maldad

inevitable, sin  salvación sólo polvo serás

siento sin  vergüenza alguna cierta satisfacción

mis propios ojos lo ven, nadie me lo vino contar.

 

Estás inmóvil, inútil, igual que en vida

incapaz hasta de un ápice de lástima inspirar

el destino de tu alma será  vagar  eternamente

pues ni en el mismo infierno tendrás un lugar.

 

Ni  desperdiciaré  lágrima  alguna

ni vestiré de luto para cubrir apariencias

al contrario, volveré a reír, soltaré mi cabello

y desde hoy sólo luciré colores de fiesta!