CULILLOS DE MAL ASIENTO
Tú que nunca quieto paras
ni dejas lugar tranquilo,
nos tienes a todos en vilo
cada vez que te separas,
y con tus trastadas acaparas
nuestro vivir intranquilo.
Eres ese delicado hilo
que la frustración reparas,
para alegrar nuestras caras
cuando vivimos contigo,
y a Dios pongo por testigo
aunque grandes sean tus taras,
siempre contaras conmigo
si un día me necesitaras.
¡Cruel sociedad que acaparas
de esta siega el sano trigo,
mientras al débil desamparas
por su indefensión lo digo!
Tus problemas poco importan
al contrario te valoran,
por eso me reconfórtan
observando cómo te adoran,
aquellos que junto a ti moran
y siempre te estarán educando,
esperando ese hasta cuando
superaran, el por qué lloran.
¡Qué duro es la vida mirar
con los ojos impacientes,
de esos muchos inocentes
que una carga han de llevar,
sabiendo son las simientes
que vanas van a quedar,
por ser ellas diferentes
y nadie querer plantar
en jardines relucientes!
Joanmoypra