Si tú estás
yo estoy
si tú te vas
yo sigo estando
como aquel viejo árbol
agarrado a la tierra con mis manos.
Pero si no estamos ninguno
ahí se queda todavía aquel viejo árbol
su tronco, sus ramas y hojas,
junto a las tumbas donde yacen los muertos
y encima de la fría piedra se posan los pájaros,
yo te extraño
y tú tienes la complicidad del silencio
y yo tu eco.