Mi dulce hogar!
Y cuando el sol predijo el amanecer de un nuevo año, anunció el nacimiento del dulce hogar. La visita de los Reyes Magos, el cumpleaños de Papá, la recuperación de Mamá y las brisas milagrosas de la Divina Pastora, crearon un manantial que junto a la mina de azúcar, fundaron la morada insigne del tesón y del amor. Ya entrando febrero con el Día de la Candelaría, nos mudamos con alegría en medio de inolvidables fanfarrias. Así nació mi nuevo dulce hogar, cual madrigal de fe y paz, dispuesto por Dios para recomenzar.