¡TRISTEZA AL GARETE!
En grado sumo exigente, ha sido este aprendizaje,
y los derechos de tesis, he pagado ya con creces;
varado siento que estoy, en un oscuro peaje:
¡Por el cual debí pasar, creo, que cientos de veces!
Abdicar no me veréis, mi graduación está cerca,
tengo hace rato aprobada, la más difícil materia;
así creáis que anda floja, de mi cabeza una tuerca:
¡Sabré imponerme, airoso, mundo cruel, a tu miseria!
Cuando estuve en la tribuna, muchos aplausos sonaron,
después en el ostracismo, sin piedad me vi arrojado;
y los amigos de ayer, por mí nunca preguntaron:
¡Aunque les dí de mi vida, sin duda el mejor legado!
Con un dolor inefable, recibí vuestra factura,
por una deuda que aún, no sé de dónde provino;
para triunfar llevo adentro, la necesaria estatura:
¡Y estoy seguro que pronto, tendrán mis odres buen vino!
Serán las escaramuzas, de mi existencia proscritas,
porque quiero en adelante, poner la flecha en el blanco;
también afirmo, seguro, cumplir cabal muchas citas:
¡En el cerebro poseo, de ideas todo un estanco!
Irás tristeza al garete, y en mar calmada esperanza,
los vientos que me acompañen, vendrán de fértiles tierras;
el ciclo de austeridad, lo arrollará la bonanza:
¡Y ambigua superstición, a mí, ya no más me aterras!
Contigo mundo, prometo, librar a ultranza mi lucha,
me has hecho adoptar temores y fantasmas prohijar;
ahora estoy bien seguro, el alma lúcida escucha:
¡Será aprehensible la vida, no apuesto más al azar!
JAIME IGNACIO JARAMILLO CORRALES
Condorandino