LA BORRA DE CAFÉ
Un buen hombre oriental
mi gran taza de café miró
lentamente se me acercó
la borra de mi café leyó.
Muy absorto se quedó,
sonriente ,suave me habló:
Cuánta paz veo mantiene,
observo la paz que tiene!!.
Bastante pensativa me dejó
la borra de café nadie me leyó
pues dijo lo que me ocurría
lo cual me dejó sorprendida.
Miriam Inés Bocchio