La luz se iluminó una vez más,
Las sonrisas florecieron por amor,
Y el pequeño corazón de nuevo enrojeció.
Brillaban las noches y amaneceres,
Todo era sonrisas,
Un arcoiris se formó en lo profundo de mi corazón.
Hasta que...
Hasta que llovió,
Una lluvia que no paró,
Una que, oscureció todo a su paso,
Borró.
Y así pedí una lluvia tras lluvia para mí,
Porque vi que tú no eras para mí.
Hasta que te conocí bien...