¡DÉJAME EN PAZ!
¡Déjame en paz, que tengo toda mi vida por delante!
¡déjame hacer con ella lo que yo elija, lo que yo quiera!
y no creas que con tus caprichos me harás más desplantes,
pues no te haré caso y seguiré adelante con los sueños que yo prefiera.
*
¡Esa será, a partir de ahora, mi única Verdad Verdadera!
Que donde yo habite sea lo que mi alma desea
y que ésto no sea solo una quimera;
que en la Morada que yo posea
habite una Felicidad \"de primera\";
que ya no me sean necesarios los lujos,
¡ni diez toneladas de preciadas joyas o sucio dinero!
Deberían ser preferibles los fantásticos momentos de embrujo
con mis más queridos amigos y de mis amantes que yo más quiero,
en los mejores lugares que yo prefiero y en donde con ellos paso
situaciones inolvidables, buceando con mis almas gemelas,
llenando oscuros vacíos, compartiendo con ellas abrazos,
aunque sea, apenas, calzando mis gastadas chinelas.
*
Eduardo Faucheux
02-07-2016