Frente al tibio fuego de un hogar
en una fría noche de invierno,
fluían mis pensamientos ;
mientras narraba un cuento.
Un cuento de los lamentos
de los días difíciles;
cuando el sol no salía
y yo…¡me dormís herida!.
Y frente al fuego del hogar
-mi cuento yo… ¡narraba!,
al mismo tiempo escuchaba a
-¡a mil lamentos escapar!.
Escapar por la ventana
de noches frías y oscuras
frente al fuego del hogar
-¡cuando mi cuento narraba!.
Marta Luisa Eichelberger