La música de tu cuerpo
me invita a bailar
cuando rítmicos tambores suenan al amar.
El eco de tu risa,
es como fresca brisa que me invita a soñar.
Vibra la piel entera,
cuando tu boca me invita a besar.
La melodía hace pausa
cuando escuchas mi respirar.
Vas escribiendo las notas
En cada fibra que tocas
para llenar mi pentagrama
Y, alcance la gloria.
Ritmo y poesía
Conjugamos cada día
Al unirse tu cuerpo y el mío
Marcando el compás.