Andan las aguas calaítas del caribe
a la tierra de las golondrinas.
Pregunto a los cielos del nido de las
serpientes:
«¿Por qué has dejado de quererme si
antes me querías?».
Y me contesta un silencio tan cercano,
como el de una nube:
«¿Por qué me quisiste si antes
no me querías?».
«Es igual a que nunca hubo querer,
si ayer me quisiste y hoy no. Y es
igual a que siempre hay querer si
hoy no me quieres y mañana sí».
Regresan las aguas calaítas y ya
se me fue una gota de vida contigo.