La edad debería enriquecer,
el capital debería ser los años,
los dividendos son solo daños,
hace tiempo que solo somos anochecer.
Ya una persona en los cuarenta,
empieza a ser rechazada,
ayer era algo y hoy es nada,
su vida que era triste ya es cruenta.
¿Adonde irán sin destino,
con estudios y sin trabajo?
¿Tendrán algún día su propio hogar?
¿Darán vueltas sin tino?
¿Les tocará siempre quedarse abajo?
¿Podrán trabajar o estudiar sin penar?