No fue casualidad que mi ventana se abriera de par en par, en esta noche de frío otoño.
Ven despacio que tengo prisa por volver a desnudarte.
Porque si llueve nos mojamos y mojados nos corremos, juntos, hacía el éxtasis del amanecer.
Acariciame los ojos y vendame los pies, hazme sentir que muero otra vez. Cualquier centimetro de tus manos son capaces de abrir mis alas y endulzar mi alma.
En esta mas profunda adicción envuelta en candentes llamas que hacen a todos los fluidos insaciables, observaremos cada minuto que pase, para poner a prueba nuestras capacidades corporales.
Y entre alucinaciones y psicodélicas posiciones, marcaré la diferencia entre imaginarte y poder estudiar tu cuerpo con detalle.
AmyRoss