Me dices, te amo, mientras un violín está sonando,
Y en sus mágicas cuerdas, el amor nos invita a bailar soñando.
Me dices, te amo, mientras tomas mis manos,
Y la música etérea, nos envuelve en su melodioso canto....
Me dices, te amo, mientras tocas mis labios,
Con la suavidad y tersura, de tus delicadas manos.
Me dices, te amo, y me ofreces tus labios,
en perversa insinuación de carnal pecado....
Me dices, te amo, y te vas de mi lado,
Huyendo de mi, soltando mis manos,
Me dices, te amo, y ya me estas llamando,
Con sólo una mirada, de soslayo...
Me dices, te amo, aunque hace tiempo has callado,
Y tus palabras para mi, son sólo recuerdo vago.
Me dices, te amo, tu voz en mi alma se ha quedado,
Mientras tanto yo, te seguiré amando...