¿PRÓJIMOS?
Aquí estamos, a veces por estar
sin decir palabras
solo escapando miradas y
sentimientos que se encuentran, se tocan
y amistan con el aire, en algún punto vacío.
Buscamos tal vez palabras que decir
y las asimos sin decirlas, porque construimos
muros en los labios que no las dejan salir
y se deshacen en la boca,
en uno de sus puntos vacíos.
Somos distintos los seres
¿y somos el prójimo?.
Nuestros lagos de dudas
tienen distintos tamaños,
nuestros volcanes de anhelos
tienen distintas alturas.
En mí hay todo un coloso, un Momotombo
y unidos en uno solo el Pacífico con el Atlántico.
Sí, nos encontramos raudos
cuando los anhelos se convierten en triunfos,
y las incertidumbres en penas y para entonces,
la inesperada lava y tsunamis nos inundan
de palabras y gestos ¿melindrosos?, pesarosos.
¡Vale la pena ser el prójimo!.
Lebusla
Derechos Reservados