Ven hacia mí
con la definitiva
certeza ineludible
del amor entero,
que a tu llegada
pueda retenerte
con la misma pasión
integra y progresiva.
Abre la noche larga
y despierta tu fiera
entre sabanas agresiva
en cuyo seno me poso
y el arrebato se vierte
con ciega intensidad
y que el libido despierte
en plenitud de acción
nuestra piel lasciva.
Estallarán las luces
de la aurora de abril
quebrando las tinieblas;
cada hora seremos uno
en esta pasión febril
y seremos un milenio
de repetidas tácticas
sexuales y sensuales
surgidas como aladas
ondas cálidas en espirales
de la mágica posesión
y de todo nuestro ingenio.