Me gusta la brisa que al caer la tarde me besa en el rostro.
El pájaro lanza sus últimos trinos buscando el rincón del descanso.
El árbol se mece tranquilo como dando gracias por haber vivido unos horas más.
Me gusta el lucero en la plaza del cielo y en el techo del mar....
Y la luna que sale lidiar su toro de luz en la noche .
Tienes los labios sedosos
como el manto de la Virgen Macarena.
Quién pudiera una noche de invierno
Dormir contigo ¡ niña ¡...junto a una hoguera.
J.C.