Impotente me encuentro
porque ayudarte no puedo.
Enfadada conmigo misma
cabreada y disgustada,
con el mundo y con la vida
por no hallar una explicación
a esta enfermedad esclava y malvada…
¡Maldita demencia ¡
que achica la mente
ahuyentando al pasado y
también al presente….
Y aunque lo intente
no comprendo
como a un hombre tan competente
esto le pueda estar ocurriendo .
Lagunas en la memoria,
desorientación, y dependencia
que a tus años no quisieras
y yo nunca pensé que te sucediera…
¡Estoy agotada
de cuerpo y alma
de luchar contra lo inevitable
y por desgracia imparable!
Deterioro día a día
cada vez más progresivo
que va dejando secuelas
no solo en la mente,
también en tu físico.
¡Qué injusta la vida
que da la espalda
a este hombre bueno
que nada de esto merecía!
Por lo menos tienes a tu familia
que aunque a veces claudiquemos
no hay enfermedad que pueda
con el amor que te tenemos.
La situación no es fácil
y ninguno nos la merecemos.
¿Qué hacer contra esto?
solo una respuesta se me ocurre,
una respuesta simple y única
que no es otra que querernos.
¡Maldita demencia
que destruyes a las personas
a las sanas y a las enfermas!
Condicionando nuestras vidas
de la manera más ruin y traicionera,
mas no podrás con la dignidad
ni la nobleza de la persona
en quien cruelmente te cebas.