El amor está, en tu alma, en tu sentir
en los deseos locos de vivir.
Esos que te roban la calma
en forma lujuriosa,
dime, porque soy curiosa,
¿por qué no lo hallas sin buscar?
tal vez sea más fácil
que lo puedas encontrar.
Este consejo te quiero dar.
En el viento se escapa de momento.
En el mar se te puede ahogar.
En el pasar se te puede ir a viajar.
En el camino puede ser sin destino.
En el transitar puede no regresar.
En el sendero volverse algo viajero.
En la playa, detrás de otro cuerpo,
puede que se vaya.
En el desierto lo hallarás medio muerto.
En el monte acorralado como sinsonte.
Entre ruinas, lo sacarás si te lo empecinas.
Dentro de una cueva,
enamorado de la luna nueva.
Dentro de una nave,
es posible que nunca se acabe.
Será extraterrestre,
puede que mucho te cueste.
Será….mira, de dónde sea,
pero es mejor que tú lo veas.
Por eso tenlo muy dentro de ti,
para que lo alimentes
pegadito a tu vivir,
así es mejor su sentir,
sintiéndolo hasta en tu vientre.
Ahí dentro de tu alma,
recuérdalo y nunca lo olvides,
lo tendrás siempre,
de ahí no lo dejes salir.
Porque resguardado,
entre ropajes de ternura,
el amor es que mejor vive