Una vez más
te has colado en mi pensamiento,
descabezando mi sueño,
rompiendo mi descanso,
inundando mi alma
de miedo y de fracaso...
No encuentro el equilibrio
de nuevo inestable me hallo,
me invade el desaliento y
la agonía me cubre con su manto...
Por favor te pido...
deja de atravesarme como un rayo,
aparta tus crueles ojos de mi,
imagíname así como estoy,
muerta, en reposo eterno
y alimenta a tu ego malvado.
Corónalo como te reclama y...
¡disfrútalo malvado!