A mis sesenta y cuatro años de vida
Cuánto, cuánto valoro la amistad,
Cuánto le reconozco a la verdad,
Cuánto te debo gran senda escondida;
Infinito es mi amor, chispa encendida,
Raíz de esa locura que me da
Esa mi amante creatividad
Para ideal mujer tan consentida;
Son más de mil locuras, mi empeño,
Son muchas las estrellas que me alumbran,
Y se muestran conmigo tan serenos,
Con tan bellos poemas que deslumbran;
Gracias por impulsar mis locos sueños:
Su honestidad y apoyo, los encumbran…