Pondré las cartas sobre la mesa. Terminaré por fin con este absurdo juego. Hace mucho tiempo atrás fue tiempo tuyo ahora, decidido estoy… ha llegado mi turno. En este juego, una baraja extraña… Encontré reyes y reinas más no de espadas. De tréboles tampoco… Miro al centro de la mesa, veo caer carta tras carta y nada.
Somos 6 jugadores en este Póker, los primeros dos se retiran sin pensarlo. Otra mano. Otro juego comienza, carta tras carta y la mía no llega…
Un juego más y al fin una luz ilumina. Algo extraño pasa, un empate se presenta. Una coincidencia en el juego, quizá en el destino. Sin saberlo, solo sentirlo, nos miramos los ojos y dejamos caer nuestras manos, miramos la mesa y… ¡Sorpresa! Dos tréboles de 4 hojas. Uno tú. Uno yo.
Tercer y cuarto jugador se retiran. El en su mano lleva un As de Espada, ella la Reina de Corazones.
~ “Misterios del Amor”
/abr anguamea.