Estoy perdido entre el todo,
una vaga conciencia que naufraga en si misma,
perdiendo en cada segundo un segundo o mas,
con la mano gélida de un amigo muerto,
riñendo los labios fogosos de amantes vacías...
Y entre tantos cielos solo veo tormentas,
lloran sobre la corteza de mi tierra
que esconde un arcoíris rocoso y elemental,
así entre el mar y las costas
chocan las vidas contra mi puerta,
con tantos golpes que dudo que sean nudillos abiertos...
Deseo despertar del rayo de la existencia
sin caer al abrazo de cualquier muerte,
pisar el mundo como nadie: descalzo,
y entre los dedos vida naciendo.
Voltear mi mirada
contra el infierno
y el paraíso,
sin ver diablos ni dioses...