Te he esperado todos mis años
enamorado cuando el sol desciende;
este amor es tan intenso
que opaca el calor de sol naciente,
y aunque es casi de noche,
sigue la pasión al rojo vivo
y en mí cuerpo la llama del amor
a cada minuto se enciende
que envuelve la tarde rumorosa
de olvidos de viejos desengaños.
sentimientos otrora extraños,
cuyo arribo ni me asusta,
ni ofende, no hay mas temor
y ajenos la razón no atiende,
solo los latidos del corazón aledaño.
Amores de ayer perdieron voz;
lo que espero es escucharte a ti
con la pasión tuya arrolladora,
con abrazo de caracol
y fluidez del tiempo que avanza
en lentísima marcha, y esperanza
que de tu llegada venga la alegría
que necesita mi vida cada hora.
Llevo en los ojos tu imagen bonita
como deseo flameante y divino
clavado en el horizonte azul
que aunque a mi este distante,
es preludio de tiempos felices.
Porque eres más que éxito,
mas que espera y desespero
dueña eres del mismo instante;
que se nos va como ráfaga humeante,
y la caricias que borra cicatrices,
que penetra el subsuelo de mi afecto,
y es el inicio del eterno proyecto
de un momento que sea indefinido,
Y aunque al otro te me vayas
siempre quedaran vestigios del amor
que en mis dedos temblorosos se enredan
y en los miembros de mi alma
son tatuajes que destruyen el olvido.