Suena la una
cuando tú no estas.
Donde solo quiero regresar,
volver el tiempo atrás.
Poder con calma admirar tu bello rostro
y besarte sin las barreras que hoy dia me separan.
Suenan las dos
Me miras tú.
No hay ahora en tu mirada
un atisbo de luz.
Cuando solo quiero ocultarme en tus brazos
y recibir tu cariño como mimos de niños.
Suenan las tres
Las lágrimas caen por mis mejillas, otra vez.
Mi mente solo sabe atormentarme
tu aroma debilita mi semblante.
Suenan las cuatro
no quiero que te vayas.
Dame un cálido beso, quédate un rato.
Porque mis manos tiemblan en tu presencia
Y sin tí, mi vida, todo es tristeza.
Suenan las cinco
vuelven las esperanzas.
Ya casi acaba este poema sin ganas.
Donde en mis días solo quiero que vuelvas,
con tus sosas bromas y noches buenas.
Suenan las seis
cuando ya me voy.
Donde no te molesto,
ni estorbo soy.
Cuando puedes reir sin temor,
y también besarla con todo el amor
así como un dia, mi niño,
lo hice yo.