Blanco sobre blanco y negro atrás...
veo la vida.
Hoy me acostumbré a deleitarme
con tu sonrisa.
Veo el verdeazul que da tu mar,
siento en tu abrazo un vendaval,
y me dispongo para amarte
en tus orillas.
Y establecer
el día que yo vi crecer
una paloma blanca en tu retina.
Y decretar
que no va más
el sufrimiento que me dió la vida.
Veo mi futuro con amor
y me doy cuenta...
¡que cegado estaba de dolor!
y daba vueltas.
Hoy mi corazón vuela feroz
¡tengo una razón para vivir!
¡y esta vida quiero compartir!
solo con vos.