El olor a sal y brea
un pescador y su barca
despuntando la mañana
contento a la mar se lanza.
Qué alegría, qué guapura!
sentir el aire en la cara
miro al marino pasmada
ante tamaña proeza.
En su red caigo rendida
admiro su gran firmeza
¡Qué vida tan trabajada
en su cara cuarteada!
Todo el año sale siempre
sin miedo a lo que le pase,
su mirada firme y fuerte
Mis ojos miran de frente
¡Ay, suspiro por besarte!
Río y miro la mar verde.