Y Caíste...
Caíste con tu dulce aroma
Impregnando nuestro cuerpo
Te Expandiste a los rincones
Hasta llegar al corazón.
Y el sabor...
El Sabor que prometiste con tu aroma
se hizo amargo en la realidad
y el por ahora de tu fragancia
fue un engaño absoluto.
Y Clavaste...
Clavaste la ponzoña Venenosa
Te Aprovechaste del Clamor del Inocente
Enredándolo con tu Dulce Aroma
Aunque no eras más que una gotita
Y te secaste...
Te secaste como flor marchita
pero dejaste tu veneno
y ahora nuestra alma se pudre
Se llena de Llagas y de costras.
Y Así...
Dejaste una herida en la tierra
herida que no sana
herida que carcome nuestra piel
y como gangrena nos consume.
Y acabaste...
Acabaste con la vida
TÚ Gotita Venenosa
Has dejado una epidemia
que va matando sin piedad.
Y me quejo...
Me quejo a gritos
Me quejo en el Día
Me quejo en la Noche
Me quejo porque muero.
Y Ahora...
Ahora no somos nada
Ahora no hay vida
Ahora no hay ser
sólo Zombies caminantes.
Y la gotita...
La Gotita surtió efecto
y el veneno que ha dejado
ha acabado con el pueblo
y sólo rastros de un país ha quedado.
¡Ay Gotita!...
Tú tienes nombre y apellido
Tienes hasta pensamientos
Tienes un color que llama a la Sangre
y Tienes la culpa de este Desastre.