Luchar todos los días:
para no convertirse en aquella bestia maldita
que tanto tememos pero fácil advertimos
en todos y cada uno de los que nos topamos
contra uno mismo todos y cada uno
de los mismos que se llevan dentro o
capitular y lograr acuerdo
generar consenso cuando uno
es minoría dentro de uno
Uno, el mismo, su similar
un cercano encuentro
de reflejos partidos
por la luz de un sol
oscurecido en soledad
Uno, el mismo, su similar
Cambiar todos: los días
para dejar de ser el mismo circulo quedado
y ser llevado por la corriente viva
de la conciencia que nos mece, cantando
es lo invisible para el ojo. es vida
el mismo aire que respiro. intruso uso
para tocar lo que las palabras
ocultan al nombrar las cosas como
aquello que lleva mi nombre
arbitrariamente no significa nada
Uno, el otro, lo idéntico
una partida rasgada, un lamento
de madre que raja la tierra
piel abierta que buscando dentro
salir de su barriga las estrellas
de un piélago de negro cielo, prende
luminosa encandilando el miedo
Uno, el otro, lo idéntico
Cambiar todas las palabras
al desvestir de antaño las corduras
regar de íes el antejardín del paraí
so perdido, al cruzar tal idilio resuenan
las áes gloriosas y las úes del miedo y
restallan las secas oes y las inquiriosas
a! a! a! de tucán o buh/ardilla; a la casa
fuego, las aves sabias, sangre roja cotidiana
fuera de este asfalto muerto, purgatoria losa
a la ley de la naturaleza vuelvo
vomito estas palabras, vuelvo
nunca han servido sino excepto
simulacro de salvación o de belleza
Uno, el otro, escaleras
si no se sube se está
bajando a todo momento
si no se vive se está
muriendo en pensamientos
o el sentimiento que renace
voy siendo a destiempo
Uno, el otro y lo idéntico