Soy niño y de abril a mayo,
hay una distancia enorme
los años, duran el doble,
y un día es formidable.
Las horas en ocasiones,
duran años o eternidades,
y un minuto, una hora más.
Soy joven y de abril a mayo,
hay exactamente un mes,
un año dura solo un año,
lo que el tiempo justo es,
un día se disfruta al máximo;
hay horas que parecen minutos,
y minutos que no los sientes.
Soy adulto y de abril a mayo,
la distancia corta es.
¡Parece menos que un mes!
Cada año que pasa es más corto,
y un día en ocasiones hora es.
La hora se ha vuelto minuto,
y un minuto; casi no existe.
Soy viejo y creo que…
no existe abril o mayo,
un año, ¿qué tanto tiempo es?,
Los días uno tras otro se suceden,
la hora un suspiro ahora es.
Los minutos la vida me extinguen
y siento como los segundos,
me devoran poco a poco, con placer…
Soy hombre, lo eterno es dios
y para él; no hay tiempo,
todo lo ve sencillo… y eterno.