La casa,
las cosas,
los cucos,
las rosas,
la luna
redonda,
y el sol
ovalado,
mi lindo
peinado,
mis ojos
ardientes,
mi niño
llorando,
consumido
en bronca,
de vino,
de locas,
de ruidos,
de horas,
zapatos
gastados,
dolidos,
dormidos,
crujidos
de pinos,
zumbándole
al viento,
al cielo,
al vestido,
al gran
alarido,
al perro
y su aullido,
al canto
escondido,
al beso
perdido
buscando
dormido
las hojas
y el nido.