Son las 3
Una alfombra de huellas,
estampadas en la grela,
de un espejo roto sin temor
a la puta maldición.
Un diablo que se adentra,
en lo más hondo de mis venas,
y que busca consecuencias,
o algún alma que perdió.
Hay un bosque de esperanzas,
mas tapado por un árbol,
ya los ciegos ojos sordos,
cantan tristes: ¡Viva el Rey!
Hay un vaso ya vacío sin rencor,
un pretexto que dejaron junto a vos,
un cabello que destrozó al amor,
y un perro que ya no ladra de dolor.
Un avión que se encandila,
una nube que se enoja,
hay un barco en la escotilla,
y una flor que se secó.
Son las tres y ya no estás.
Son las tres y ya no estoy.
Mis palabras se perdieron,
en un nido de recuerdos,
un desierto de botones,
que no dejan ver el sol.
Son las tres y estás dormida,
lejanía en tu rincón.
Son las tres de la mattina.
Son las tres y ya me voy.