Mujer de piedra (Prosa)
El frío de la tarde,
la va abrazando y ella,
es queda...
Va sintiendo agua- hielo,
secando…
el recinto del alma,
los vientos la poseen,
despojan esperanza.
Un día, es una noche,
con sigilo... llegando...
La muerte, viene al cisne,
tempranera, la cubre
en calma...
sus alas se descalzan
rodeando su cuerpo,
se entrañan en horas
se apoca
sin pronuncio
figura y alma
se hace piedra,
se hace sombra,
de pie, enmohecida.
como esfinge,
sus ojos
desprenden gotas cristal-rocío
Las olas la castigan
así, como si nada,
Será, que solo en cuentos
existen esos besos que salvan...
ella solo sueña, que es parte de las
rocas, de una gran montaña…