Un camino, me consume.
Al andar siento la belleza del paisaje,
del cual, se han agrandado varias de las nubes.
Pequeñas se ven las montañas y muy grandes son.
Así eres: minucia belleza, te ves pequeñas, y eres del tamaño del firmamento.
Un poco de fuego y viento, las hojas de donde quiero tomar mi último aliento y decir,
eres mi llamarada de viento.