I
Caballero oscuro, de oscura armadura,
de silencio atroz y de estirpe ruda,
de verdades crudas, de corcel de rayos,
de garras tenaces e historias absurdas.
Centurión que esgrimes, de dolor, tu arma.
Tú te manifiestas, detrás de las lágrimas.
II
Blanco caballero, de helena armadura,
se desglosa el tiempo sobre tu montura.
Tu atril resguarda, sendos manifiestos,
con historias simples que atesora el viento.
Los recuerdos son, entonces tu arma,
Tú te manifiestas, detrás de las lágrimas.
III
Caballero Hidalgo, del color del fuego,
en el corazón atreves tu juego.
Profanas el ego, destruyes las máscaras,
dejas tras del cuerpo, expuesta al ánima.
La emoción, tu arma, batalla y estalla…
Tú te manifiestas, detrás de las lágrimas.
IV
Por último, tú. Caballero alado de gentil apego,
tinta de poetas, impulsor de sueños.
de besos fugaces, de fuertes deseos,
de momentos únicos y eternos momentos.
Caballero alado, llegado del cielo, el amor es tu arma,
Tú también…
Tú, te manifiestas, detrás de las lágrimas.