Iluminadas las avenidas en la gran capital, su multitud de habitantes descansan tras diversas actividades que realizan entre semana. Aquel sabado en la noche sin duda les sacudiò las fuerzas de la naturaleza. Sandra asistiò a la acostumbrada verbena que realizaban sus compañeros de estudio cada fin de semana, en la que ella era la primera atracciòn por su esbelto cuerpo y baile perfecto lleno de gran sensualidad, sus amigas le decìan -Sandra ya puedes ganarte la vida bailando. Y esa noche se fue a su casa pensando en eso. Compartìa una amena charla con su madre luego de cenar. Sùbitamente la estridencia de un fuerte sonido las paraliza, Sandra siente que viene un tren por el techo y por debajo de la casa, todo se estremeciò y perdieron el equilibrio cayendo en el piso todo lo que estaba a su alrededor, la reacciòn fue inmediata. -Pronto madre salgamos se esta cayendo la casa. En ese instante su madre queda atrapada entre algunos escombros y a la vez le grita a su hija. sal pronto de aquì salvate tu. Y todo empezò a derrumbarse, ante los ojos de Sandra que pedìa auxilio para su madre, al correr a la calle todo era desolaciòn, casas derrumbadas calles agrietadas y gente llorando y rezando, ella solo se quedo mirando los restos de lo que era su casa y con la vista perdida sabia que allì yacìa su madre, injustamente vìctima de aquel terremoto, como tantos mas en toda la capital y en varios estados a nivel nacional. Ese dìa descubrìo que nadie puede con las fuerzas de la naturaleza. Le suceden tiempos difìciles al quedar sin su madre y sin un techo en que vivir. Aceptando la ayuda de algunos familiares que se hicieron cargo por ser menor de edad. Suspende sus estudios y comienza a trabajar, alcanzando la mayoria de edad. Al ver que es joven y bella y lo que mas le apasiona es bailar, decide ganar dinero extra, asistiendo en las noches a club nocturnos y en muy poco tiempo empezò a ser solicitada como la mejor bailarina de striper en la capital del paìs. Pronto se enamora de un joven y se aparta de aquella vida para entregarse a vivir un tòrrido romance en la promesa de ambos casarse y formar un hogar. Al quedar embarazada el se fue para nunca mas regresar. Al poco tiempo de nacer su hijo, lo entrega a un familiar con el pretexto de buscar el sustento para los dos, asì mismo se compromete a cubrir todos los gastos de la manutenciòn del menor, y asì lo cumpliò. Ese dìa juro nunca mas enamorarse, y trabajar sin descanso para lograr solvencia econòmica y asì no le faltarà en el futuro nada a ella o a su hijo. Trabajo durante un par de años como la mejor bailarina de stripers, muy bien pagada, y disfrutando de generosos obsequios de algùn que otro amigo. Logrando finalmente la tan ansiada solvencia econòmica, invirtiendo su dinero en negocios comerciales, se alejo de aquella vida en sus años de madurez. La relaciòn con su hijo la mantuvo a distancia, razòn por la cual su hijo nunca quizò vivir a su lado, solo momentos compartìa con ella. Finalmente el se caso y dejò de verlo un largo tiempo, la soledad la consumìa en aquella casa, que cada dìa se hacìa mas grande y ella mas pequeña. Un buen dìa alguìen toco las puertas de la mansiòn, y sentada en un sillòn, escucha a su amiga decir: -Sandra tienes visita. -Y en veloz carrera un niño entra gritando: -\"¡donde esta mi abuela, quiero conocerla!\". Sandra se levanta con pasos cansados y los cabellos plateados por tantos años, lo mira y a la vez mira a su hijo en èl, diciendo: -\"esa soy yo\". De improviso se escucha una mùsica de fondo y su hijo le dice: -Mamà, ¿nos permites esta pieza?, esta vez bailaremos los tres el baile de la vida. Y cuentan que un dìa bailando se quedo dormida en los brazos de su hijo.
y la vida continua...