Marah

El brindis de Amarilis

Yo sé que acudirás al valle de Amarilis

capaz de transformar los trágicos aludes

y ofrece la florseda que lleva a la alta cumbre:

el club donde te espero tan solo con biquini.

 

No puedes despreciar la copa de este brindis

de uvas de un viñedo famoso por su dulce,

 y préndese el amor que duerme en un estuche,

yo sé que beberás mi cóctel, mi daiquiris….

 

No soy la reina, solo la novia del festejo,

es cierto que derrámanse las mieles de mi alma

el único metal preciado que te ofrezco,

 

a ti por ser el rey que vence en las batallas,

y puedes con tus besos dejarme emborrachada…

libando todo el néctar…que emana de tu cuerpo.

 

Amarilis: uno de los nombres que damos a la primavera.