Los padres de Sùsan organizaron un agradable reencuentro con grandes amistades y algunos compañeros de estudio en sus años universitarios. Compartieron agradables momentos intercambiando hechos de sus vidas pasados y presentes. Al final de la noche Sùsan tomo un largo baño y cayo rendida del cansancio. A la mañana siguientes ya su padre leìa la prensa en la cocina mientras su madre tomaba un cafè, Sùsan tomo una taza de tè y conversaron los tres de la feliz reuniòn. El padre de Sùsan se levanta y dice: -Ya esta bueno de charlas es hora de ir a trabajar, supongo quieres dar una vuelta a la fabrica Sùsan. -Claro papà, luego nos vemos mamà. -Y que opinas hija de las instalaciones de la fabrica, son recientes remodelaciones, ya sabes que estos meses del año la producciòn crece, y los pedidos tambièn. -Todo me parece muy bien padre, pero sin embargo hay algo que no esta muy bien. -Y se puede saber que es eso hija. -Pues estuve hablando con mamà, y me contò lo de tu infarto. tienes que cuidar tu salud y este ritmo de trabajo que llevas tiene un horario muy exigente, necesitas con urgencia un asistente de confianza, que pueda suplirte en caso necesario, por ejemplo tomarte un descanso serìa muy bueno para ti y para mamà tambièn. -Pero que dices Sùsan, no has escuchado este dicho \"el ojo del amo engorda el ganado\". Si papà pero recuerda sin salud no hay nada, bien papà luego hablaremos mas un poco de todo esto , por ahora voy atender algunos asuntos relacionados con mi trabajo y esta noche nos vemos en casa. Sùsan camina por horas aquella avenida que le traìa recuerdos de su vida de estudiante,cuando la unìca preocupaciòn era estudiar y ser feliz, necesitaba superar esa sensaciòn de inseguridad que le asaltaba y le paralizaba a raìz de su divorcio, mas de una vez siente que no sabe que hacer con su vida. Aleja esos pensamientos y se dedica a echar un vistazo del movimiento del àrea comercial que la ocupa en la plaza del negocio que realiza en su paìs, esperando quizàs darle continuidad allì en caso de ser propicio el ambiente y quizàs solo quizàs volver a regresar a su paìs natal con sus hijos, y seguir adelante. -\"Sùsan, Sùsan\". Al girar la mirada casi no reconoce a Juancho y al ver su sonrisa reacciona. -Hola Juancho que agradable sorpresa, ¿como estas?. Juancho estaciona su auto y baja estrechando entre sus brazos a Sùsan. -Mi Sùsan querida, amiga del alma, cuantos años sin vernos, ¿pero que haces aquì?, lo ùltimo que me contaron era que te casaste y te fuiste a vivir a otro paìs. -Pues ya lo ves el buen hijo regresa a casa dicen por allì, y dime ¿te casaste? con aquella novia que te celaba del aire. -Si y tambièn me divorciè de ella, los celos nos separaron en poco tiempo, ¿y tu tienes hijos?,¿ como te va en tu vida de casada, eres feliz?. -Pues son muchas preguntas a la vez solo contestarè una, si tengo hijos 2, ¿y tu, tienes hijos?. -No, como te dije no resulto.-Estas muy apurada, tienes tiempo de tomar un cafè. -Vamos amigo, la verdad me alegra verte de nuevo. Y conversaron como dos buenos amigos al igual que lo fueron en otros tiempos, sin embargo Sùsan no hablo de su divorcio. -Bien Juancho ya es algo tarde debo irme a casa por ahora me estoy quedando en casa de mis padres, estudio el mercado de los negocios, quizàs me decida hacer algo aquì. -Buena noticia amiga, si me lo permites puedo llevarte a tu casa como en los viejos tiempos (rieron los dos), espero tu esposo no sea celoso, y Sùsan nuevamente hizo silencio, no querìa hablar del tema con ninguna persona. Llegaron juntos a la casa y los padres de Sùsan como era costumbre tomaban el tè en el porche todas las noches. -Hola, papà, mamà, recuerdan a Juancho. -Pues como no lo vamos a recordar, desde que se fue a la fuerza aèrea nadie mas supo de èl, y cuenta muchacho como te ha ido, trae mas tè mi amor. Compartieron con Juancho un par de horas y se despidiò quedando en volver nuevamente. En ese momento repicò el telèfono y Sùsan corriò atender la llamada eran sus hijos y su hermana llamando para darle una mala noticia.
y la vida continua...