La felicidad se desborda de mi cuerpo, estar con las personas que más amas es la satisfacción más grande que cualquier persona puede sentir, aparte del sexo.
Cada momento que se comparte con estos seres, tanto buenos o malos son los mejores en mi mente.
La felicidad invade mi corazón al ver el rostro de mi sangre, de mi gente.
El amor de la familia es indispensable para el ser humano, para el alma, para la mente. Y aunque problemas abunden la mayor bendición es ver las sonrisas de cada uno de ellos.
: Valencia: