ENTIERRO DE LA SARDINA
Enterraron la sardina
entre llantos y lamentos,
los personajes de cuentos
que viéndoles se adivina,
como una fiesta termina
de luto casi todos puestos;
más vestidos con los restos
prestados por la vecina,
van tocando con sordina
por los carnavales muertos.
Las criticas acabaron
ya los trajes se recogen,
y los muchos que esperaron
de nuevo se sobrecogen,
pues aquello que heredaron
con tristeza terminaron
como las normas exigen,
en fiestas que son el origen
del desmádre que empezaron
y más de dos mil años pasaron,
desde que sus leyes rigen.
Volvemos a una rutina
que con la fiesta perdimos,
cuando tras la estudiantina
tanto desmelene vivimos,
envueltos en unas canciones
que emocionados sentimos,
entre máscaras y mimos
que ensalzan esas pasiones,
de escondidas frustraciones
que del tiempo recibimos.
¡El Carnaval es la vida
y una máscara el reflejo,
pues a todos nos convida
a mirarnos en el espejo,
desde el punto de partida
hasta arrugados por viejos!
Joanmoypra