Rosa Maria Reeder

La fidelidad a Dios

Señor bendito,

he dejado mi semilla en tus manos

y ha florecido en mi alma servidora y fiel.

 

Dios eterno amor

tu me haces crecer

a través de tu palabra de luz

recibo confianza y fidelidad.

 

Padre divino,

atraviesas los mares

y abres los caminos

con tu gracia y justicia

limpias las almas

y la sed queda saciada

en la fuente de vida.

 

Amado creador

la fe que fundaste

se respalda en tu promesa de salvación,

en la tierra, tu palabra luminosa

y nosotros tu universo

somos tus servidores.

 

Bendito Dios,

que tu fidelidad sea bálsamo

y mis labios dejen almas fortalecidas de fe.

 

 

Rosa Maria Reeder

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